lunes, 26 de septiembre de 2011

Balance de la Legislatura del Recorte


Esta legislatura ha dado mucho de que hablar, al fin y al cabo nos ha pillado una de las mayores crisis que se recuerdan. Estos últimos años día tras día no hemos hecho más que oir hablar de la crisis, del paro, de la deuda…. Todos los medios de comunicación se han preguntado estas últimas semanas como dejara Zapatero el país y si me permiten voy a hacer mi propio análisis acerca de la situación  en la que nos encontramos. Al margen de las pifias con las que nos ha deleitado el presidente y su gabinete en estos últimos meses, me voy a centrar un poco en el terreno económico y la utilidad de los recortes.

España creció durante el final de la legislatura de Aznar y parte del gobierno de Zapatero a base del ladrillo. Era un gran ejemplo de país en alza e incluso llegamos a tener superávit, por primera vez en la historia de la democracia. Sin embargo las turbulencias económicas que sacudieron el mundo, fueron el desencadenante de la abrupta ruptura de la burbuja inmobiliaria. El primer error garrafal de Zapatero fue, obviamente, la negación de la profunda crisis que se nos venía encima, y alguna que otra desacertada declaración de cómo íbamos a superar a cierto vecino como potencia económica. A partir de ese momento comenzó a aceptar la realidad y llevo a cabo algunas medidas para reactivar la economía, como la deducción de los 400 euros y el posterior plan E. Dichas medidas no tuvieron un resultado apreciable, especialmente los 400 euros, y únicamente contribuyeron al aumento del déficit. También hubo que recapitalizar los bancos para evitar que se parara el flujo de dinero y los prestamos, todas estas situaciones contribuyeron a seguir aumentando la cifra de nuestra deuda.

Hasta ese momento la situación española no era excesivamente mala (en comparación con otros países ricos), teníamos una deuda no excesivamente elevada, aunque si una alarmante tasa de paro. Algo por otro lado normal, teniendo en cuenta que toda esa mano de obra no cualificada que se dedicaba a la construcción no podía acceder a ningún puesto de trabajo. Y más aun teniendo en cuenta que el crecimiento del país se centro casi exclusivamente en la construcción obviando otros sectores en los que se podían haber recolocado.

La siguiente etapa fue la de los recortes. Los bancos rescatados  consideraron que los países que les habían prestado el dinero, no eran digno de sus inversiones y comenzaron los ataques indiscriminados a la deuda soberana de los países. España entonces, presionado por sus socios europeos y distintas organizaciones económicas de peso, se vio abocado a la reducción de su déficit y para ello realizo las tan impopulares medidas de privatizar empresas publicas, bajar el sueldo a los funcionarios, congelar pensiones, etc.

En este punto me gustaría explicar que por aquel entonces España no poseía un déficit excesivamente elevada, aunque si poseía una alta tasa de endeudamiento por parte de las familias. Y por aquel entonces ayuntamiento  y CCAA ya daban signos de desgaste, pero el gobierno central en menor medida. De hecho el premio nobel de economía Paul Krugman en un articulo en el NY Times afirmo que España debía incentivar su economía a través del gasto y no de los recortes.

Los indiscriminados trasquilones que sufrió el estado español sirvieron para calmar a los mercados. También a nivel europeo los grandes países siguiendo las políticas neoliberales hicieron recortes, aumentaron la edad de jubilación, y tomaron por bandera el déficit cero, llegándolo a incluir en las constituciones de Alemania y España. Pero ¿de verdad la austeridad da resultado? El crecimiento de los países se ha estancado, España al 0.8 Alemania ha pasado de crecer de un 3.2 % a un 0.1%. Las economías no tienen incentivos reales para crecer.

Las agencias de calificación y el FMI afirman, en recientes declaraciones, que la austeridad  no basta para la reactivación de la economía. Además los recortes siempre se centran en los mismo, sanidad, ayudas sociales, educación. En las últimas semanas hemos sido testigos de uno de los muchos tijeretazos a los que ha sido sometido el sistema educativo. Si seguimos bajando el nivel España dejara de competir en el mercado internacional al carecer de trabajadores cualificados.

Pero vamos a ser justos, la legislatura de zapatero ha sido una legislatura impersonal en el sentido que las medidas han sido impuestas de fuera, pero no ha sido el causante de todos los males, como se le acusa últimamente, ya que las medidas que tomo fueron las recomendadas por sus socios europeos como Merkel y Sarkozy. También es destacable la cutre electoralista e indecente oposición ejercida por el Partido Popular, que nunca trato de llegar a un acuerdo con el ejecutivo y saboteo sistemáticamente todas sus propuestas, cuando realmente no habrían diferido mucho en las que hubieran hecho ellos.

Finalmente teniendo en cuenta que España carece de una  industria potente, la construcción hasta dentro de 10 años estará parada, la ciencia y la innovación han sido relegadas a un segundo plano, ahora encima recortamos en educación  y las únicas políticas económicas consisten en el recorte por el recorte, yo os invito a la siguiente reflexión ¿Cómo pensamos crecer en el futuro?

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